Como persona mayor y alumno de las clases de adultos, pretendo dar mi punto de vista, sobre lo que representa dichas clases para mi en particular, para las demás personas mayores -sean del sexo que sean-, creo, no dejara de tener el mismo valor.
Nacido en el año 1936. Tiempo de Guerra Civil. Criado en cortijo en pleno campo, a unos cinco kilómetros de la población, siendome imposible ser escolarizado. No por ésto, deja de surgir en mi el interés de conseguir aprender a leer y escribir. También a manejar las matemáticas o aritmética.
Me considero un autodidacta aprovechado en todo momento, las personas que sabían algo: yo, no dejaba de preguntar, forma o método empleado para ir consiguiendo el conocimiento.
A los 68 años cumplidos, tengo la ocasión de apuntarme a las clases de adultos, y hasta el día de la fecha que tengo 73 años, no he dejado de asistir, siempre que he tenido ocasión de hacerlo.
En alguna otra ocasión, ya he comentado que considero una estupenda idea de nuestros políticos: no hay cosa más grande para una persona mayor, que toda su vida ha sido analfabeta y al final -antes de morir- pueda conseguir el poder leer la mayoría de textos, pudiendo interpretar sus contenidos.
No creo tener que añadir nada más, para saber cual es mi opinión sobre las clases de adultos.
Polinyà a: 15 de Abril de 2.007.
Manuel López la Torre.
Fecha en que paso el presente escrito al blog: 13 de Mayo de 2.010 (Hora 21.02)
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