Cuando una persona nace, nunca se puede saber -al menos hasta ahora-, en los tiempos en que vivimos, si, su vida será mejor o peor. Lo único que conocemos de la vida de cada uno es, sobre las vidas pasadas y nada más. Por otra parte, también podemos decir que de las historias, escritas, pueden que sean aproximadas y nunca reales.
Un libro de historia, no contiene más verdad, que la que su autor ha querido o ha sabido reflejar. Hay que tener en cuenta, que las historias, las escriben sólo los vivos -nunca los muertos-, si son los ganadores, las escriben como ganadores. Si por otra parte las escriben los perdedores, lo hacen de tal manera, que no se parecen casi en nada, con relación al desarrollo de los hechos. En lo que pueden coincidir, será en la causa del hecho.
Con lo anteriormente referido, no es que quiera asegurar no puedan existir historias reales, y tanto que existen, aunque se puedan contar con mucha facilidad y sin llegar a cansarse.
Polinyà: Abril de 2.007.
Manuel López la Torre
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